

Acaba de recorrerse buena parte de la geografía española presentando su nuevo trabajo, por lo que hemos querido entrevistarles para conocer de primera mano sus impresiones sobre su reciente gira. Además, nos cuenta cómo fue contratada por Subterfuge Records y nos avanza sus planes. | Comprar![]() Escuchar ![]() |
Alcohol Jazz es uno de los referentes de la escena de música negra en España. En su cuarto disco, Beleça, ha sabido fusionar su poderosa instrumentación con bases electrónicas bien usadas, dando lugar a un irresistible nu-funk que proporciona mucho y buen baile. Acaba de recorrerse buena parte de la geografía española presentando su nuevo trabajo, así que hemos querido entrevistarles para conocer de primera mano sus impresiones sobre su reciente gira. Además, nos cuenta cómo fue contratada por Subterfuge Records y nos avanza sus planes.
¿Cuáles son vuestras influencias confesables?
Alcohol Jazz: Nos confesamos deudores de toda la black music norteamericana. Respecto al Jazz somos mega fans de Sonny Rollins y de Jimmy Smith entre otros. Del Funk seguimos oyendo a George Clinton, James Brown y Sly & The Family Stone; del Funk-Rock hemos versioneado siempre temas de The War y de los brasileños Trio Mocoto (que recomendamos fervientemente); del Blaxpoitation alucinamos con Curtis Myfield con la banda sonora de Superfly; del funk-jazz recibimos buenas vibraciones de Maceo Parker y de Pucho & His Latin Soul Brothers; de la música Disco del final de los 70´s bailamos con Chic, Tavares, Sugarhill Gang, LaBelle, el street-funk de Earth, Wind & Fire; nos enamoramos con el love-funk de Barry White........ ¡no quiero parecer una enciclopedia!
¿Y vuestros grupos amigos?
Alcohol Jazz: Somos muy coleguitas de Lalo, Paquito y Miguelito de Fundación Tony Manero. Nos vinieron a ver hace muchos años a la Sala Apolo de Barna, a partir de ahí nos hemos cruzado en diferentes actuaciones y siempre acabamos absolutamente embriagados hablando de buena música. Nos respetamos y admiramos mutuamente. También tenemos muy buena relación con un grupo gallego que se llama Groove Fathers. Son músicos que llevan años luchando por el acid-jazz hispano y son realmente buenos. Como todos los grupos instrumentales tienen una carrera muy dura. Nos gusta también Celofunk: su vocalista, Susana Ruiz, es la voz femenina de nuestro Beleça.
¿Cómo fueron vuestros inicios, vuestra evolución estilística?
Alcohol Jazz: Llevamos 20 años haciendo funk music y hemos pasado una auténtica revolución estilística siempre dentro de la música negra. En nuestra primera etapa, muy etílica por cierto, pensábamos que íbamos a ser grandes figuras del Jazz. Eso sí, siempre aborrecimos las academias de Jazz, porque la gente salía de allí como si fueran ladrillos: todos tocaban igual. Nosotros, como buenos autodidactas, sacábamos de oído los temas de Jazz que más nos gustaban, siempre fuera de los circuitos de estándares. Nos dimos cuenta que al publico le gustaban los temas más bailables y decidimos hacer composiciones propias recogiendo influencias de baile, psicodelia y funk. Vimos con asombro que a la gente, a pesar de ser instrumental, se lo pasaba muy bien. Después vinieron el blaxpoitation y la música de las series americana como Starsky&Hutch (que firma J.J.Johnson), siempre apostando por la diversión y el dancing. Más tarde decidimos que también queríamos imitar los temas Disco que oíamos cuando aún no teníamos bigote. Siempre con la intención de ser autores de nuestros propios temas y sin querer ser nunca un grupo de revival. Nuestra música es nuestra vida.
¿Cómo os definirías ante alguien que no ha tenido la suerte de escuchar ninguno de vuestros discos?
Alcohol Jazz: Somos un grupo, sobre todo, divertido. Hacemos música para que la gente baile y entre en estado de éxtasis (como lo hacemos nosotros). Siempre hemos tenido problemas con las etiquetas y los periodistas están obsesionados con ellas. Amor que sin duda el público no comparte; solo le interesará saber que ofrecemos buena música mezclada con un buen espectáculo. Aseguramos que moverán las caderas.
Fuisteis uno de los primeros grupos en componer un funk muy influenciado por la música de los setenta, instrumental y muy bailable. En un panorama musical, el español, en el que este tipo de música era una rareza. En vuestros primeros conciertos, ¿cómo fue la acogida del público?
Alcohol Jazz: Siempre fuimos un grupo de directo. En el directo nos encontramos como pez en el agua. Desde el principio la acogida fue excelente: el público venía a divertirse con nosotros. ¡Objetivo cumplido! Nos decían: ¡nos lo pasamos bien y no hemos echado de menos una voz! Esto nos gratificaba porque la gente que no tiene unos grandes conocimientos musicales, no es tonta, y saben identificar lo que les gusta. Solo es cuestión de acercárselo, de que lo vivan. Más tarde vinieron los discos que nosotros consideramos tarjetas de presentación. Nuestra fuerza siempre ha estado en el directo.
¿Cómo empezó vuestra relación con el sello Subterfuge Records?
Alcohol Jazz: Conocíamos a Carlos Galán a través de Eli, el hermano del que por aquel entonces era nuestro batería Ramiroquai. Nos tenía que ir a ver a una edición del Espárrago Rock en Granada. Si ese día le gustábamos nos propondría grabar en su sello “Música para un guateque Sideral”. Pero ¡Oh desgracia! Nuestro guitarrista se lesionó una mano y no pudimos ir a tocar. Fue la edición del festival que se tuvo que suspender por un fuerte temporal. Carlos dijo: “¡Estos chicos tienen la suerte de su lado. Los que estamos aquí hemos estado a punto de ahogarnos!” Esto fue lo que le decidió definitivamente a grabarnos.
¿A qué se debe vuestra decidida aproximación a la electrónica en Beleça?
Alcohol Jazz: Conocimos al que hoy es nuestro DJ y electronic-master, Txaloman, durante la grabación del Suerte y padrino. Era un amigo que colaboraba con nosotros cantando unos temas como si fuera un instrumento más. Sus colaboraciones se vieron reflejadas en el Cd Insólito. Habíamos renovado con Subterfuge y queríamos variar la forma de trabajar del grupo. Txaloman nos propuso intentar introducir la electrónica en algunos de los temas en los que estabamos trabajando. El resultado nos gustó tanto que decidimos hacer todo el Cd con bases electrónicas. Para suavizar ese impacto, contamos con la colaboración del percusionista mejicano Emiliano Huertas que dio un toque muy “cool” a la sección rítmica.
El hammond desapareció casi por completo de vuestra música tras Persecución implacable. ¿Algún motivo en concreto?
Alcohol Jazz: Siempre nos ha gustado el sonido Hammond. En Persecución implacable tuvimos la suerte de que colaboraran con nosotros Alberto Kiyoshi (Malarians) y Eva Reina (Hechos contra el Decoro). Estuvimos una temporada haciendo una gira con teclado Farfisa (la versión italiana de Hammond), que tiene un sonido muy característico. En Beleça ha colaborado con nosotros Juan de Dios (sintes en Deluxe). Estamos encantados con él. Nos ha metido órganos hammond, clavecines, violines sintetizados, pianos de cola, sirenas policiales etc. Nos abrió la mente al maravilloso mundo del teclado sintetizado.
Mi disco preferido de los cuatro que habéis editado es Beleça. Sospecho que esto es como preguntarle a unos padres a qué hijo quieren más, pero como yo me he mojado, espero lo mismo de vosotros: ¿algún álbum por el que tengáis especial cariño?
Alcohol Jazz: Nos gustan, sobre todo, Persecución implacable, ya que resume 15 años de directos por todos los garitos de Madrid (eran temas que nos conocíamos al dedillo y con muy pocos medios pudimos hacer un buen trabajo); y Beleça, ya que contamos con la producción de nuestro gurú José María Rosillo del que hemos aprendido mucho, también se ha incorporado a las grabaciones Dudu, nuestro nuevo guitarristas (del oscuro grupo vallecano de Heavy-Funk ADN). Pensamos que sin duda es nuestro disco más trabajado y divertido a la vez. Hemos pasado momentos inolvidables y desternillantes en la grabación de Beleça.
¿Cuáles son vuestras impresiones de vuestra reciente gira española?
Alcohol Jazz: Muy Buena. Nuestros fans han acogido nuestro nuevo disco con verdadera pasión. También se va incorporando, poco a poco, nueva gente. Pensamos que nuestro nuevo directo es aún más bailable que los anteriores. Vemos día a día que el funk electrónico puede arrasar en las pistas de baile. Vamos ampliando la gira con nuevos conciertos que surgen de los que ya hemos realizado. Es una labor lenta pero efectiva.
Sois uno de los componentes de un trío de lujo de funk nacional, compuesto por Mojo Project, Fundación Tony Manero y vosotros. Justamente habéis coincidido en dos fechas, el 11 en la sala Razmatazz de Barcelona y el 16 en la sala Divino Aqualung de Madrid. ¿Cómo surgió este interesantísimo triple concierto?
Alcohol Jazz: En muchas entrevistas nos habían unido y nos habían preguntado sobre la relación de los tres grupos. Pero el que tomó la iniciativa fue Marc Ventosa, de Sinnamon, con la colaboración de Chester. Él fue el que nos propuso la idea y todos estuvimos encantados. Ha sido un gran éxito de público pero, que con la nueva legislación anti-tabaco, no creo que podamos contar con los mismos patrocinadores. Musicalmente fue una amalgama extraordinaria.
¿Las ventas de Beleça han respondido a vuestras expectativas?
Alcohol Jazz: Siempre que le pregunto a Carlos Galán, me da largas. Sabemos que se está vendiendo muy bien por Internet pero, como siempre, hay problemillas con la distribución. Dentro de unos meses, supongo, tendremos algún dato.
¿Qué opináis de la situación actual de la industria discográfica?
Alcohol Jazz: La situación es grave. Nosotros no tenemos más remedio que verlo como espectadores porque no sabemos nada de negocios, solo entendemos de música. Es un asunto que corresponde a los políticos y a los empresarios, que han estrujado demasiado la teta y ahora se les ha secado. El futuro está en las compañías independientes que son las únicas que se muestran capaces de innovar, las multis están totalmente anquilosadas. No hay nuevos productos comerciales desde hace 20 años.
Cuando guardáis los instrumentos, ¿qué hace Alcohol Jazz?
Alcohol Jazz: Todos los que nos dedicamos a la música tenemos que trabajar en muchos tipos de trabajos basura. Pero cada uno es un mundo. Julián y yo somos licenciados en filosofía y cada uno lleva su carrera por vías diferentes: nuestro trompetista es maestro y yo me estoy dedicando a escribir un libro de etnobotánica que se titula “Plantas Psicoactivas de la Península Ibérica”. Nuestro bajista, Ricardo, es un mega-manitas que es tan capaz de hacerse una casa como de construirse bajos eléctricos diseñados por él mismo. Dudu, el guitarrista, compagina Alcohol Jazz con el duro trabajo detrás de la barra, en su Vallecas natal. Por ultimo, Txaloman ha dejado su trabajo en una agencia de marketing para dedicarse de pleno a la labor de DJ y demás negocios.
¿Podéis descubrirnos algún artista o disco que os haya sorprendido últimamente?
Alcohol Jazz: Vuelvo a insistir con el Trío Mocoto, padres de la samba-funk.
¿Cuáles son vuestros planes para el futuro inmediato?
Alcohol Jazz: Continuar con la gira y acabarla. También estamos trabajando en adaptar a formato de Sound System la música de Alcohol Jazz. Estamos realizando ya algunas actuaciones en discotecas fuera de las salas de concierto: es un cambio y sabemos que lo tenemos que asimilar con tiempo, pero estamos convencidos que tenemos que pasar por ahí. A la vez, tenemos otro CD firmado con Subterfuge Records en el que ya estamos en fase de composición y en el otoño empezaremos a realizar las primeras maquetas y aproximaciones. Estamos tan contentos con Beleça que seguramente contaremos con el mismo Staff técnico para este nuevo trabajo.